La ondulada meseta de Anatolia, situada a 1000m de altura y con varias cordilleras altas, es un terreno propicio para el esquí, las estaciones de Kaisery e Isparta tienen instalaciones para el esquí alpino mientras que el de montaña se puede practicar en numerosos lugares.
Además de esquiar y con la escasa información que hemos encontrado en internet, localizamos una cueva en el pueblo de Kayakent, como nos suele ocurrir, buscando esta remota cueva encontramos la "Turquía profunda".
Después de una excursión de escaso interés espeleológico y cuando circulábamos por las estepas, cometemos el error de salirnos del asfalto para comer, quedando atrapados en el barro. La foto es de los primeros momentos, cuando aun pensábamos que saldríamos con la ayuda de las cadenas, pero cuando el barro llegaba a mitad de rueda dejamos de pensar en fotografías. Gracias a la amabilidad de la gente de estos pueblos y a uno de sus camiones pudimos salir del apuro.
Durante estos días de frío y nieve decidimos no visitar la región del monte Ararat, en la frontera con Armenia e Iran, debido a que las bombonas de gas (inapropiadas para estas temperaturas) y el estado de las carreteras Turcas (sin buen mantenimiento invernal) hacen el viaje por esa región algo complicado. Con temperaturas, en estas fechas, de entre -1ºC y -20ºC.
